La clase media harta de la política económica del Gobierno que la condena a su desaparición

Por: Francisco Medina
La clase media mexicana se encuentra harta de la política económica del Gobierno Federal que la está condenando prácticamente a su desaparición, en su afán de proteger a los grandes intereses del oligopolio de los beneficios, esos para los que México es sólo una colonia destinada a la extracción de sus riquezas en favor de la acumulación rentista de unos cuantos.
Así lo informó José Alberto Aguilar Iñárritu, Coordinador del Consejo Nacional en Defensa de la Clase Media, quien dijo que a pesar de que este organismo ha insistido muchas veces ante el Gobierno en que la clase media es la última línea de flotación del sistema, parece que tal advertencia no tiene ningún eco en la temeraria toma de decisiones públicas. “Parece que más que al pueblo, se teme al amo. El Presidente Calderón no entiende que un cambio radical en México podría venir de este sector de la sociedad al que se le ha maltratado de manera brutal, así lo hemos advertido en nuestros recorridos por todo el país. Este sector se expresa muy molesto”.
Manifestó que hoy no importan las muchas voces que desde los sectores progresistas se alzan para advertir el desastre y cuestionar el rumbo, pero por un absurdo de los tiempos, la correlación de fuerzas sigue beneficiando a los conservadores. Las cofradías partidarias, están muy ocupadas negociando prebendas con el gobierno a cambio de sus votos, poco o nada cuentan los gritos de la sociedad”, puntualizó.
El ex diputado federal manifestó que nadie en este gobierno que les debe tanto, se atreve a tocar ría a tocarlos ni con el pétalo de una rosa, para eso está el pueblo y en especial su aguantadora clase media. Si se acabo PEMEX a costa de transferir sus recursos a este pequeño núcleo del grandes intereses creados, pues ni modo, como diría Versalles antes de la Revolución Francesa que paguen los Estados Generales; si el pueblo no tiene pan, pues que coma pastel, diría María Antonieta, en este tono está el Gobierno federal.
En este contexto, señaló que tal y como se esperaba, entró enero y con él, la cascada de aumentos de impuestos y su consecuente impacto en los precios en detrimento de todo el pueblo mexicano y en particular de la cada vez más disminuida clase media que ahora verá afectados sus mermados ingresos con un IVA al 16%, con un ISR al 30%, con un 3% a las telecomunicaciones, con un incremento de 8 y 9 centavos respectivamente a las gasolinas Magna y Premium, en fin una inflación que se situará por arriba del 5%, un crédito escaso y caro y alza generalizada de insumos para la pequeña y mediana empresas con pérdida de mercado, entre otros horrores económicos, eso sin mencionar la creciente inseguridad de personas y de las familias, el desempleo, y la constante amenaza de quiebra y desaparición de la micro y pequeña empresa.
Indicó que se tienen registros de que tan sólo en 2009, los efectos de la crisis económica mundial y el ineficaz trabajo de la Secretaría de Economía llevaron al cierre de cerca de 300 mil pequeñas y medianas empresas (PYMES), 200 mil de las cuales se fueron a la informalidad, provocando la pérdida de un millón de empleos.
Manifestó que el PRI es la fuerza política con mejores condiciones para ganar los comicios de este año y posicionarse para regresar a Los Pinos en el 2012, la pregunta es ¿para que?, y la respuesta debe comenzar a confeccionarse a partir de sus pronunciamientos en la defensa de los intereses concretos del pueblo, en este caso de la afectada clase media mexicana.