El sistema mexicano está agotado, y las recientes medidas fiscales aprobadas por el Poder Legislativo son transitorias y deben estar sujetas a una revisión, dijo Roberto González Barrera, presidente de los consejos de administración de las firmas Gruma y Grupo Financiero Banorte
El sistema mexicano está agotado, y las recientes medidas fiscales aprobadas por el Poder Legislativo son transitorias y deben estar sujetas a una revisión, dijo Roberto González Barrera, presidente de los consejos de administración de las firmas Gruma y Grupo Financiero Banorte.
En el segundo día de actividades de la séptima Cumbre de Negocios, González consideró que el agotamiento del esquema de gobierno propició durante los últimos 25 años un crecimiento bajo y baja generación de empleos.
González enumeró siete medidas “necesarias” para cambiar el sistema de gobierno: preservar y fortalecer el mercado interno; manejar el negocio bancario con precaución, como lo han hecho autoridades y banqueros; incrementar la inversión en infraestructura física, así como incrementar la educación en calidad de educación.
Recomendó unificar el sistema eléctrico, fortalecer la exploración y perforación petrolera con alianzas, sin perder el control y la soberanía del Estado; incrementar la inversión en investigación científica, tecnológica y de mercados para ser competitiva a nivel internacional, y no detener el crecimiento de la agricultura y sus actividades conexas, con una política que estimule el aumento de rendimientos por hectárea.
Valentín Díez Morodo, presidente del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior (Comce), expresó que hacia el final del año se pueden registrar crecimientos positivos, pero que en términos generales el balance del país es negativo.
Díez ubicó como los ejes más importantes del crecimiento económico y la generación de empleos en el país los temas relacionados con el marco legal y la seguridad jurídica.
Después de que nuestro país firmó el primer Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, el potencial exportador de México se duplicó, de la misma forma como lo hicieron nuevos TLC, explicó.
A pesar de ello, el país no ha sacado un provecho al 100% de los otros convenios comerciales, y su economía de exportaciones sigue orientada a maquilas y exportaciones petroleras.
“Tenemos que quitarnos la fuerte dependencia de las maquilas y el petróleo”, dijo Díez, quien planteó la necesidad de una reforma fiscal en la que participen todos: empresas, partidos, sociedad civil.
Carlos Slim, presidente vitalicio de Grupo Carso, dijo en el primer día de actividades que México dejó escapar cuatro oportunidades claras de crecimiento económico. En los últimos 30 años, dijo, México ha tenido cuatro oportunidades de salir del subdesarrollo: la primera fue al final de los 70 con el precio del petróleo y la deuda externa; en 1989, se dio la reapertura del crédito externo a México y la llegada de una intensa inversión.
La tercera fue el dinamismo de economías mundiales después de 1995, y el aumento del precio del crudo; la actual, las políticas monetarias y fiscal, tasas bajas dependiendo de las alternativas, pero tres de ellas ya se perdieron, dijo.
Banca puede dar créditos
Roberto González Barrera, presidente del Consejo de Administración de Banorte, dijo que “la banca está bien capitalizada para dar el crédito necesario”. En su exposición, durante la séptima Cumbre de Negocios, González dijo que después de este periodo de crisis es necesario manejar “con precaución” el negocio bancario.
Exhortó a los empresarios reunidos a aprovechar las bajas tasas de interés que actualmente ofrece la banca privada para poner en marcha proyectos de infraestructura y desarrollo.
El directivo bancario consideró viable que la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) autorice la inversión de una parte del ahorro de los trabajadores, garantizando su seguridad, en empresas y proyectos de infraestructura que fomenten el crecimiento económico. Monterrey, NL
En el segundo día de actividades de la séptima Cumbre de Negocios, González consideró que el agotamiento del esquema de gobierno propició durante los últimos 25 años un crecimiento bajo y baja generación de empleos.
González enumeró siete medidas “necesarias” para cambiar el sistema de gobierno: preservar y fortalecer el mercado interno; manejar el negocio bancario con precaución, como lo han hecho autoridades y banqueros; incrementar la inversión en infraestructura física, así como incrementar la educación en calidad de educación.
Recomendó unificar el sistema eléctrico, fortalecer la exploración y perforación petrolera con alianzas, sin perder el control y la soberanía del Estado; incrementar la inversión en investigación científica, tecnológica y de mercados para ser competitiva a nivel internacional, y no detener el crecimiento de la agricultura y sus actividades conexas, con una política que estimule el aumento de rendimientos por hectárea.
Valentín Díez Morodo, presidente del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior (Comce), expresó que hacia el final del año se pueden registrar crecimientos positivos, pero que en términos generales el balance del país es negativo.
Díez ubicó como los ejes más importantes del crecimiento económico y la generación de empleos en el país los temas relacionados con el marco legal y la seguridad jurídica.
Después de que nuestro país firmó el primer Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, el potencial exportador de México se duplicó, de la misma forma como lo hicieron nuevos TLC, explicó.
A pesar de ello, el país no ha sacado un provecho al 100% de los otros convenios comerciales, y su economía de exportaciones sigue orientada a maquilas y exportaciones petroleras.
“Tenemos que quitarnos la fuerte dependencia de las maquilas y el petróleo”, dijo Díez, quien planteó la necesidad de una reforma fiscal en la que participen todos: empresas, partidos, sociedad civil.
Carlos Slim, presidente vitalicio de Grupo Carso, dijo en el primer día de actividades que México dejó escapar cuatro oportunidades claras de crecimiento económico. En los últimos 30 años, dijo, México ha tenido cuatro oportunidades de salir del subdesarrollo: la primera fue al final de los 70 con el precio del petróleo y la deuda externa; en 1989, se dio la reapertura del crédito externo a México y la llegada de una intensa inversión.
La tercera fue el dinamismo de economías mundiales después de 1995, y el aumento del precio del crudo; la actual, las políticas monetarias y fiscal, tasas bajas dependiendo de las alternativas, pero tres de ellas ya se perdieron, dijo.
Banca puede dar créditos
Roberto González Barrera, presidente del Consejo de Administración de Banorte, dijo que “la banca está bien capitalizada para dar el crédito necesario”. En su exposición, durante la séptima Cumbre de Negocios, González dijo que después de este periodo de crisis es necesario manejar “con precaución” el negocio bancario.
Exhortó a los empresarios reunidos a aprovechar las bajas tasas de interés que actualmente ofrece la banca privada para poner en marcha proyectos de infraestructura y desarrollo.
El directivo bancario consideró viable que la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) autorice la inversión de una parte del ahorro de los trabajadores, garantizando su seguridad, en empresas y proyectos de infraestructura que fomenten el crecimiento económico. Monterrey, NL
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