También les afecta el recorte federal, algunos municipios empiezan a retrasar pagos a proveedores y piensan adquirir deuda.
Los municipios del Norte de Jalisco, una de las zonas con mayor pobreza, están atravesando por una difícil situación debido a dos efectos de la crisis económica: la caída en las participaciones federales, que ya está comenzando a generar que algunos gobiernos acumulen deudas con sus proveedores, y sobre todo la reducción en el flujo de remesas, que en algunas poblaciones con Huejúcar ha descendido hasta 50 por ciento, todo esto de la mano del regreso de un importante número de paisanos procedentes de EU, que ahora buscan opciones para mantenerse en sus tierras de origen.
El municipio de Huejúcar está pasando por una situación particularmente grave, pues la semana pasada cerró K&S Sistemas y Arneses Mexicanos, la única fábrica en la región que llegó a dar hasta 300 empleos a personas de varios municipios, 80 de ellos eran de Huejúcar (Público, 31 de julio de 2009). “Estamos dependiendo de las remesas que mandan de EU, de la agricultura y de la ganadería. Pero las remesas han caído más de la mitad. Tenemos ahora construcciones que están totalmente paradas, se detuvo la inversión en materiales y ahora los que venden materiales están cerrando también”, explicó Raymundo Bañuelos, síndico del municipio.
En Huejúcar habitan cerca de siete mil personas, y Bañuelos calculó que en el último año han regresado cerca de 700 paisanos procedentes de EU. “Algunos regresan con la esperanza de invertir en algún negocio, y como no han encontrado el mercado como lo esperaban, están también batallando y cerrando”.
Francisco Madrigal Reyes y José Luis Lamas son dos casos que reflejan la situación del regreso de cientos o miles de paisanos. El primero de ellos es un joven de 29 años que vivió durante ocho años en EU, hace cinco meses regresó a Huejuquilla, porque fue deportado, pero contó que en EU “está muy dura la situación, los trabajos están muy escasos”.
Él trabajó en la jardinería, en la construcción y al finalmente montó una pequeña compañía de reciclaje en Reno, Nevada. Para mantenerse en Huejuquilla, está por abrir una paletería con algunos socios invirtiendo 200 mil pesos. Pero su objetivo principal es instalar una empresa que recolecte, separe y procese basuras o residuos, para lo que él y sus socios están dispuestos a invertir tres millones de pesos (mdp), y solicitan otros seis mdp al gobierno del estado para concretar el proyecto, que “es muy viable”.
Contó que en EU “sí hay mucha gente regresando a México, muchos otros se resisten a venir porque si está dura la situación allá, aquí es más duro. Mucha gente se metió a lo de las casas y ya no tiene forma de pagarlas y se arruinan créditos, y el trabajo y se regresan”.
El caso de José Luis Lamas es similar. Vivió diez años trabajando en la construcción en Denver, Colorado, pero regresó a Huejuquilla el año pasado, pues “por la falta de empleo perdí mi casa, llegué a tener tres propiedades allá y a raíz de todo esto [crisis inmobiliaria] al final tuve que entregar mi casa”.
Dijo que en México se ve “un panorama positivo, de hecho, pensé estando en EU en venir sólo por una temporada y regresarme, pero hoy lo menos que me gustaría es regresar, porque aparte mi familia está muy a gusto aquí”.
Lamas tiene un proyecto para industrializar una veta de cantera que tiene en un terreno, para lo que requiere unos dos mdp, pide también el apoyo del gobierno del estado, pero él está dispuesto a aportar 30 por ciento de la inversión.
Miguel Ángel Medina López, presidente municipal de Huejuquilla, calculó que cerca de 5 por ciento de los paisanos oriundos de esta población de ocho mil habitantes ha regresado. “A algunos les hemos dado trabajo en la construcción de obras públicas, otros están acogiéndose a un programa del gobierno del estado que es para apoyo a emigrantes que puedan establecer un pequeño negocio”.
En Colotlán, una de las poblaciones de mayor tamaño en el Norte, la caída de las remesas ha afectado bastante a la economía municipal, pues el flujo ha descendido alrededor de 20 por ciento, calculó Enrique Álvarez de la Torre, presidente municipal, aunque en cuanto al regreso de paisanos, “no se ha notado tanto, sí han regresado algunos, pero realmente no se ha visto así como en masa, como en otros municipios”.
Recorte presupuestal
La disminución en las participaciones federales y estatales también ha afectado a los municipios del Norte de Jalisco. “Nos ha afectado el recorte presupuestal como a todos los municipios, afortunadamente en nuestro nivel de endeudamiento no estábamos a tope, nuestro gasto corriente tampoco nos estamos comiendo el total de las participaciones por lo tanto tenemos un pequeño margen”, dijo Miguel Ángel Medina López, alcalde de Huejuqilla.
Pero advirtió de que en caso de que se suspendan algunas obras públicas por el recorte, aumentará el desempleo entre las personas que dependían de estas laborales para subsistir.
El caso de Huejúcar es más grave. “Ya no podemos ni pagar a nuestros proveedores, nos disminuyó casi 50 por ciento las participaciones federal y estatal. Estábamos recibiendo alrededor de un mdp y en la última remesa llegaron casi 600 mil pesos, con ese dinero únicamente estamos cubriendo sueldos, gasolina y electricidad, todo lo demás lo estamos deteniendo, apoyos a educación, a salud, porque no cubrimos”, dijo Raymundo Bañuelos.
Advirtió que es posible que en los próximos meses se detengan los pagos de sueldos a empleados municipales y que el gobierno decida buscar un financiamiento bancario.
En Colotlán, Enrique Álvarez dijo que se calcula una disminución de 30 por ciento en las participaciones para el municipio, lo que se ha traducido en menos apoyos para eventos como las fiestas patrias o la tradicional feria del piteado, y advirtió que hacia el final del año podría haber problemas para pagar la nómina municipal.
Zona marginadaLa zona Norte de Jalisco está conformada por diez municipios:Huejúcar
Huejuquilla
Bolaños
San Martín de Bolaños
Chimaltitán
Villa Guerrero
Totatiche
Colotlán
Santa María de los Ángeles
Mezquitic
Alternativas en HuejúcarEl director del Consejo Estatal de Promoción Económica (CEPE), Federico Torres, comentó que se estudian proyectos que podrían instalarse en la nave industrial del gobierno del estado en Huejúcar, donde funcionó hasta la semana pasada la fábrica automotriz K&S Sistemas y Arneses Mexicanos. Señaló que se trata de una iniciativa agroindustrial y otra del ramo lechero, y dijo que el plan que resulte apoyado debe generar cuando menos entre 200 y 250 empleos, puesto que K&S despidió a 300 trabajadores a lo largo del proceso que llevó a cierre por la crisis económica.
Jesús Estrada Cortes/Colotlán, Jal. (Milenio)
El municipio de Huejúcar está pasando por una situación particularmente grave, pues la semana pasada cerró K&S Sistemas y Arneses Mexicanos, la única fábrica en la región que llegó a dar hasta 300 empleos a personas de varios municipios, 80 de ellos eran de Huejúcar (Público, 31 de julio de 2009). “Estamos dependiendo de las remesas que mandan de EU, de la agricultura y de la ganadería. Pero las remesas han caído más de la mitad. Tenemos ahora construcciones que están totalmente paradas, se detuvo la inversión en materiales y ahora los que venden materiales están cerrando también”, explicó Raymundo Bañuelos, síndico del municipio.
En Huejúcar habitan cerca de siete mil personas, y Bañuelos calculó que en el último año han regresado cerca de 700 paisanos procedentes de EU. “Algunos regresan con la esperanza de invertir en algún negocio, y como no han encontrado el mercado como lo esperaban, están también batallando y cerrando”.
Francisco Madrigal Reyes y José Luis Lamas son dos casos que reflejan la situación del regreso de cientos o miles de paisanos. El primero de ellos es un joven de 29 años que vivió durante ocho años en EU, hace cinco meses regresó a Huejuquilla, porque fue deportado, pero contó que en EU “está muy dura la situación, los trabajos están muy escasos”.
Él trabajó en la jardinería, en la construcción y al finalmente montó una pequeña compañía de reciclaje en Reno, Nevada. Para mantenerse en Huejuquilla, está por abrir una paletería con algunos socios invirtiendo 200 mil pesos. Pero su objetivo principal es instalar una empresa que recolecte, separe y procese basuras o residuos, para lo que él y sus socios están dispuestos a invertir tres millones de pesos (mdp), y solicitan otros seis mdp al gobierno del estado para concretar el proyecto, que “es muy viable”.
Contó que en EU “sí hay mucha gente regresando a México, muchos otros se resisten a venir porque si está dura la situación allá, aquí es más duro. Mucha gente se metió a lo de las casas y ya no tiene forma de pagarlas y se arruinan créditos, y el trabajo y se regresan”.
El caso de José Luis Lamas es similar. Vivió diez años trabajando en la construcción en Denver, Colorado, pero regresó a Huejuquilla el año pasado, pues “por la falta de empleo perdí mi casa, llegué a tener tres propiedades allá y a raíz de todo esto [crisis inmobiliaria] al final tuve que entregar mi casa”.
Dijo que en México se ve “un panorama positivo, de hecho, pensé estando en EU en venir sólo por una temporada y regresarme, pero hoy lo menos que me gustaría es regresar, porque aparte mi familia está muy a gusto aquí”.
Lamas tiene un proyecto para industrializar una veta de cantera que tiene en un terreno, para lo que requiere unos dos mdp, pide también el apoyo del gobierno del estado, pero él está dispuesto a aportar 30 por ciento de la inversión.
Miguel Ángel Medina López, presidente municipal de Huejuquilla, calculó que cerca de 5 por ciento de los paisanos oriundos de esta población de ocho mil habitantes ha regresado. “A algunos les hemos dado trabajo en la construcción de obras públicas, otros están acogiéndose a un programa del gobierno del estado que es para apoyo a emigrantes que puedan establecer un pequeño negocio”.
En Colotlán, una de las poblaciones de mayor tamaño en el Norte, la caída de las remesas ha afectado bastante a la economía municipal, pues el flujo ha descendido alrededor de 20 por ciento, calculó Enrique Álvarez de la Torre, presidente municipal, aunque en cuanto al regreso de paisanos, “no se ha notado tanto, sí han regresado algunos, pero realmente no se ha visto así como en masa, como en otros municipios”.
Recorte presupuestal
La disminución en las participaciones federales y estatales también ha afectado a los municipios del Norte de Jalisco. “Nos ha afectado el recorte presupuestal como a todos los municipios, afortunadamente en nuestro nivel de endeudamiento no estábamos a tope, nuestro gasto corriente tampoco nos estamos comiendo el total de las participaciones por lo tanto tenemos un pequeño margen”, dijo Miguel Ángel Medina López, alcalde de Huejuqilla.
Pero advirtió de que en caso de que se suspendan algunas obras públicas por el recorte, aumentará el desempleo entre las personas que dependían de estas laborales para subsistir.
El caso de Huejúcar es más grave. “Ya no podemos ni pagar a nuestros proveedores, nos disminuyó casi 50 por ciento las participaciones federal y estatal. Estábamos recibiendo alrededor de un mdp y en la última remesa llegaron casi 600 mil pesos, con ese dinero únicamente estamos cubriendo sueldos, gasolina y electricidad, todo lo demás lo estamos deteniendo, apoyos a educación, a salud, porque no cubrimos”, dijo Raymundo Bañuelos.
Advirtió que es posible que en los próximos meses se detengan los pagos de sueldos a empleados municipales y que el gobierno decida buscar un financiamiento bancario.
En Colotlán, Enrique Álvarez dijo que se calcula una disminución de 30 por ciento en las participaciones para el municipio, lo que se ha traducido en menos apoyos para eventos como las fiestas patrias o la tradicional feria del piteado, y advirtió que hacia el final del año podría haber problemas para pagar la nómina municipal.
Zona marginadaLa zona Norte de Jalisco está conformada por diez municipios:Huejúcar
Huejuquilla
Bolaños
San Martín de Bolaños
Chimaltitán
Villa Guerrero
Totatiche
Colotlán
Santa María de los Ángeles
Mezquitic
Alternativas en HuejúcarEl director del Consejo Estatal de Promoción Económica (CEPE), Federico Torres, comentó que se estudian proyectos que podrían instalarse en la nave industrial del gobierno del estado en Huejúcar, donde funcionó hasta la semana pasada la fábrica automotriz K&S Sistemas y Arneses Mexicanos. Señaló que se trata de una iniciativa agroindustrial y otra del ramo lechero, y dijo que el plan que resulte apoyado debe generar cuando menos entre 200 y 250 empleos, puesto que K&S despidió a 300 trabajadores a lo largo del proceso que llevó a cierre por la crisis económica.
Jesús Estrada Cortes/Colotlán, Jal. (Milenio)
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