Las empresas de autotransporte de carga mexicanas están liquidadas. Así lo sostuvo Noé Paredes Meza, vicepresidente de la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar) en entrevista. El empresario aseguró el viernes pasado que la pretención de la Secretaría de Hacienda de aumentar los ingresos públicos a través de la aplicación de nuevos impuestos provocará el colapso total de más de 60% del autotransporte de carga.
“Las empresas del autotransporte de carga están casi liquidadas debido a la crisis económica que vive el país y a la elevada fiscalización que enfrentamos con los costos de operación; éstos ya son insostenibles”, dijo.
Paredes Meza añadió que un reajuste al alza en Impuesto Empresarial de Tasa Única (IETU), Impuesto Sobre la Renta (ISR) o cualquier otro gravamen hará que un porcentaje elevado de micro, pequeñas y medianas empresas del sector decidan migrar a la informalidad.
La informalidad en esta industria significa no declarar las operaciones diarias sí como no someterse a los reglamentos o normas vigentes en suelo mexicano. El entrevistado dijo que en el país es fácil operar por esa vía y es más rentable. “No entendemos cómo es posible que la autoridad hacendaria no pueda detectar a los más de 12 millones de informales que operan en el país y que representan un enorme potencial de recursos públicos y sólo pretenda recuperar dinero vía los contribuyentes cautivos”.
El también candidato a presidir la Cámara del Autotransporte de Carga para el periodo 2009-2010 detalló que los autotransportistas de carga mexicano decidieron sumarse a la exigencia del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
En días pasados el máximo organismo empresarial exigió a Hacienda que “realice su trabajo y encuentre la fórmula para captar recursos vía los informales”.
“La situación es preocupante”, sostiene Paredes Meza, quien amagó: “Si los funcionarios de Hacienda no toman conciencia y cancelan cualquier intento de aumentar impuestos, las cifras de contribuyentes activos podría reportar una caída de porcentajes muy elevados”.
La industria del autotransporte de carga está conformada en más de 70% por hombres camión, es decir, aquellos empresarios que operan con no más de nueve unidades; ellos son quienes detentan, por ejemplo, el parque vehicular más viejo y recurren casi cualquier cosa que les permita mantener la rentabilidad de sus operaciones.
“Los empresarios no podemos pagar más, estamos muy golpeados y nos vamos a hacer menos competitivos”, advirtió. México, D.F./David Aguilar Juárez (El Universal)
“Las empresas del autotransporte de carga están casi liquidadas debido a la crisis económica que vive el país y a la elevada fiscalización que enfrentamos con los costos de operación; éstos ya son insostenibles”, dijo.
Paredes Meza añadió que un reajuste al alza en Impuesto Empresarial de Tasa Única (IETU), Impuesto Sobre la Renta (ISR) o cualquier otro gravamen hará que un porcentaje elevado de micro, pequeñas y medianas empresas del sector decidan migrar a la informalidad.
La informalidad en esta industria significa no declarar las operaciones diarias sí como no someterse a los reglamentos o normas vigentes en suelo mexicano. El entrevistado dijo que en el país es fácil operar por esa vía y es más rentable. “No entendemos cómo es posible que la autoridad hacendaria no pueda detectar a los más de 12 millones de informales que operan en el país y que representan un enorme potencial de recursos públicos y sólo pretenda recuperar dinero vía los contribuyentes cautivos”.
El también candidato a presidir la Cámara del Autotransporte de Carga para el periodo 2009-2010 detalló que los autotransportistas de carga mexicano decidieron sumarse a la exigencia del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
En días pasados el máximo organismo empresarial exigió a Hacienda que “realice su trabajo y encuentre la fórmula para captar recursos vía los informales”.
“La situación es preocupante”, sostiene Paredes Meza, quien amagó: “Si los funcionarios de Hacienda no toman conciencia y cancelan cualquier intento de aumentar impuestos, las cifras de contribuyentes activos podría reportar una caída de porcentajes muy elevados”.
La industria del autotransporte de carga está conformada en más de 70% por hombres camión, es decir, aquellos empresarios que operan con no más de nueve unidades; ellos son quienes detentan, por ejemplo, el parque vehicular más viejo y recurren casi cualquier cosa que les permita mantener la rentabilidad de sus operaciones.
“Los empresarios no podemos pagar más, estamos muy golpeados y nos vamos a hacer menos competitivos”, advirtió. México, D.F./David Aguilar Juárez (El Universal)
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