Por: Francisco Medina
La secretaria de Energía, Georgina Kessel, informó que debido a las solicitudes no atendidas por la extinta Luz y Fuerza
del Centro (LFC) durante 2008 se inhibió la creación de 187,650 empleos..
La titular de la Secretaría de Energía (Sener) informó que el impacto en la actividad económica de la energía no
suministrada ascendió a 8,200 millones de dólares al año, cifra cercana a un punto porcentual del Producto Interno Bruto
(PIB).
Durante la presentación de los impactos que causó el incumplimiento de Luz y Fuerza del Centro, Kessel Martínez comentó que
la extinta compañía dejaba de cumplir con los plazos establecidos en la normatividad y en una gran cantidad de casos la
primera respuesta a las solicitudes de servicios era negativa.
Ello pese a que la Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica prevé en su artículo 25 la obligación de suministrarla a
todo el que lo solicite, salvo que exista impedimento técnico o razones económicas para hacerlo.
Dijo que las solicitudes no atendidas durante el año de referencia representaban negar los servicio en una ciudad del
tamaño de Tijuana, lo que en consecuencia inhibió el crecimiento económico en la zona centro del país.
Las solicitudes no atendidas de LFC representaron una carga de 900 megawatts aproximadamente, lo que equivale al 2.5% de la
demanda máxima del país.
Agregó que para estimar el impacto de las negativas en la actividad económica durante el año de referencia se utilizaron
supuestos conservadores para la energía no suministrada y el factor de carga.
Con ello, resultó que lo que le costo a la zona centro en materia económica el no generar la electricidad requerida sumó 8
mil 200 millones de dólares.
La funcionaria sostuvo que los principales sectores afectados por esa situación fueron los desarrolladores de vivienda de
interés social a gran escala; constructores de centros comerciales y tiendas de autoservicio y otros sectores como
industria, vivienda, residencial, entre otros.
En el segmento de desarrolladores de casas de interés a gran escala, el segmento de mayor impacto, la carga no atendida
ascendió a 164.3 megawatts.
Esa negativa retrasó las inversiones en el sector. Tal situación sumada a la necesidad de nueva infraestructura impactó en
el precio final de la vivienda hasta en 4.0 por ciento al alza.
Para estimar el impacto en el empleo por las solicitudes no atendidas se consideró la carga promedio de dos kilowatts y dos
empleos por vivienda.
De esta forma las factibilidades negadas en 2008 inhibieron la creación de 180,700 empleos de la zona centro del país.
Otro de los sectores afectados fue el de la construcción de centros comerciales y tiendas de autoservicio lo que también
generó retrasos en las inversiones y erogación de conceptos no previstos para que algunos centros contaran con una planta
provisional, en tanto se aprobaba la solicitud.
La carga no atendida en ese sector fue de 47.1 metgawatts en 2008. En ese sector se dejaron de generar alrededor de 3,550
empleos, según información de las empresas constructoras.
En los sectores de industria, vivienda, residencial, escuelas, entre otros, donde la carga no atendida fue de 263
megawatts, se dejaron de generar 3,400 empleos, que sumados a los 180,700 empleos del sector vivienda y los 3,550 empleos
de empresas constructoras, se dejaron de generar en total 187,650 empleos.
La secretaria de Energía, Georgina Kessel, informó que debido a las solicitudes no atendidas por la extinta Luz y Fuerza
del Centro (LFC) durante 2008 se inhibió la creación de 187,650 empleos..
La titular de la Secretaría de Energía (Sener) informó que el impacto en la actividad económica de la energía no
suministrada ascendió a 8,200 millones de dólares al año, cifra cercana a un punto porcentual del Producto Interno Bruto
(PIB).
Durante la presentación de los impactos que causó el incumplimiento de Luz y Fuerza del Centro, Kessel Martínez comentó que
la extinta compañía dejaba de cumplir con los plazos establecidos en la normatividad y en una gran cantidad de casos la
primera respuesta a las solicitudes de servicios era negativa.
Ello pese a que la Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica prevé en su artículo 25 la obligación de suministrarla a
todo el que lo solicite, salvo que exista impedimento técnico o razones económicas para hacerlo.
Dijo que las solicitudes no atendidas durante el año de referencia representaban negar los servicio en una ciudad del
tamaño de Tijuana, lo que en consecuencia inhibió el crecimiento económico en la zona centro del país.
Las solicitudes no atendidas de LFC representaron una carga de 900 megawatts aproximadamente, lo que equivale al 2.5% de la
demanda máxima del país.
Agregó que para estimar el impacto de las negativas en la actividad económica durante el año de referencia se utilizaron
supuestos conservadores para la energía no suministrada y el factor de carga.
Con ello, resultó que lo que le costo a la zona centro en materia económica el no generar la electricidad requerida sumó 8
mil 200 millones de dólares.
La funcionaria sostuvo que los principales sectores afectados por esa situación fueron los desarrolladores de vivienda de
interés social a gran escala; constructores de centros comerciales y tiendas de autoservicio y otros sectores como
industria, vivienda, residencial, entre otros.
En el segmento de desarrolladores de casas de interés a gran escala, el segmento de mayor impacto, la carga no atendida
ascendió a 164.3 megawatts.
Esa negativa retrasó las inversiones en el sector. Tal situación sumada a la necesidad de nueva infraestructura impactó en
el precio final de la vivienda hasta en 4.0 por ciento al alza.
Para estimar el impacto en el empleo por las solicitudes no atendidas se consideró la carga promedio de dos kilowatts y dos
empleos por vivienda.
De esta forma las factibilidades negadas en 2008 inhibieron la creación de 180,700 empleos de la zona centro del país.
Otro de los sectores afectados fue el de la construcción de centros comerciales y tiendas de autoservicio lo que también
generó retrasos en las inversiones y erogación de conceptos no previstos para que algunos centros contaran con una planta
provisional, en tanto se aprobaba la solicitud.
La carga no atendida en ese sector fue de 47.1 metgawatts en 2008. En ese sector se dejaron de generar alrededor de 3,550
empleos, según información de las empresas constructoras.
En los sectores de industria, vivienda, residencial, escuelas, entre otros, donde la carga no atendida fue de 263
megawatts, se dejaron de generar 3,400 empleos, que sumados a los 180,700 empleos del sector vivienda y los 3,550 empleos
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