Hace dos años se invertía el 3.7 por ciento del PIB y ahora se pretende ejercer el equivalente al 5.0 por ciento, con lo que se recuperarán alrededor de 110 mil empleos de 700 mil desempleados que dejará la crisis económica durante el presente año.
En México se invertirá, entre 2007 y 2012, el 5.0 por ciento del producto interno bruto (PIB) para desarrollar infraestructura, pero se requeriría invertir el 60 por ciento de ese mismo indicador para tener un desarrollo similar al de Brasil, Rusia, India y China, destacó BBVA Bancomer.
Adolfo Albo, economista en jefe de la institución para México, explicó que hace dos años se invertía el 3.7 por ciento del PIB y ahora se pretende ejercer el equivalente al 5.0 por ciento, con lo que se recuperarán alrededor de 110 mil empleos de 700 mil desempleados que dejará la crisis económica durante el presente año.
Al presentar un estudio sobre el sector infraestructura, el economista afirmó que en general los proyectos de infraestructura del gobierno federal llevan un avance del 50 por ciento.
Aunque reconoció que la inversión en infraestructura es positiva, aseguró que se le tiene que dar celeridad a la construcción de obras de hidrocarburos, carreteras, agua, entre otras.
Explicó que el Programa Nacional de Infraestructura tiene un avance limitado debido a una compleja regulación y a la aversión de los inversionistas al riesgo, producto de la crisis financiera, lo que truncó o postergó la ejecución de proyectos importantes.
“Se tiene que reconocer que en México, por varias décadas, no se invirtió en infraestructura y hay un rezago importante en comparación con naciones de desarrollo similar, como Malasia y Chile”.
Dijo que México está en la posición 61 del ranking de competitividad de infraestructura del Foro Económico Mundial, en el que hay 131 países y la nación debería avanzar por lo menos 11 lugares, equiparable con su nivel de ingreso.
“La meta podría ser más ambiciosa buscando tal vez alcanzar a Malasia, que está en la posición 47 en términos de ingreso y 23 en infraestructura, o bien a Chile, que se ubica en la posición 31 en términos de infraestructura”, explicó Eduardo Torres, economista de BBVA Bancomer.
Eduardo Huerta/México, D.F. (Milenio)
Adolfo Albo, economista en jefe de la institución para México, explicó que hace dos años se invertía el 3.7 por ciento del PIB y ahora se pretende ejercer el equivalente al 5.0 por ciento, con lo que se recuperarán alrededor de 110 mil empleos de 700 mil desempleados que dejará la crisis económica durante el presente año.
Al presentar un estudio sobre el sector infraestructura, el economista afirmó que en general los proyectos de infraestructura del gobierno federal llevan un avance del 50 por ciento.
Aunque reconoció que la inversión en infraestructura es positiva, aseguró que se le tiene que dar celeridad a la construcción de obras de hidrocarburos, carreteras, agua, entre otras.
Explicó que el Programa Nacional de Infraestructura tiene un avance limitado debido a una compleja regulación y a la aversión de los inversionistas al riesgo, producto de la crisis financiera, lo que truncó o postergó la ejecución de proyectos importantes.
“Se tiene que reconocer que en México, por varias décadas, no se invirtió en infraestructura y hay un rezago importante en comparación con naciones de desarrollo similar, como Malasia y Chile”.
Dijo que México está en la posición 61 del ranking de competitividad de infraestructura del Foro Económico Mundial, en el que hay 131 países y la nación debería avanzar por lo menos 11 lugares, equiparable con su nivel de ingreso.
“La meta podría ser más ambiciosa buscando tal vez alcanzar a Malasia, que está en la posición 47 en términos de ingreso y 23 en infraestructura, o bien a Chile, que se ubica en la posición 31 en términos de infraestructura”, explicó Eduardo Torres, economista de BBVA Bancomer.
Eduardo Huerta/México, D.F. (Milenio)
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