viernes, 24 de julio de 2009

PRI: cambiar sede traerá conflictos

La dirigencia nacional del PRI indicó que no permitirá que la refinería Bicentenario se construya en otro lugar que no sea el estado de Hidalgo, porque no hay argumentos para cambiar su sede.
Samuel Aguilar, secretario adjunto del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, dijo que si el PAN presiona para que la refinería se lleve a Guanajuato se generaría un nuevo conflicto. Aclaró que la defensa de la sede no es para beneficiar a un gobierno priísta, sino porque hay estudios de factibilidad elaborados por Petróleos Mexicanos (Pemex), que ubicaron al territorio hidalguense como la mejor opción para construir la planta.
“Es una refinería, no una banqueta, y en es sentido no hay absolutamente ningún tipo de argumento por el cual se deba modificar la decisión ya emitida exclusivamente con base en un estudio de carácter técnico”, insistió.
Aguilar dijo que se debe respetar la determinación inicial y consideró que si el gobierno federal le entrega la obra a Salamanca “generaría señales falsas”.
Enfrentamiento estéril
El gobernador de Veracruz, Fidel Herrera (PRI), lamentó el espectáculo del gobierno de Felipe Calderón de “echar a pelear” a los gobiernos de dos estados por la sede de una refinería que ya se había asignado a Hidalgo y llamó a la Federación a cesar su política de “confusiones y de enfrentamientos estériles”.
“Si ya está asignada que respalden a Hidalgo para que tenga las inversiones inmobiliarias de inmediato y no estén dando este espectáculo que a nadie sirve en una hora tan delicada y difícil de enfrentar, con la crisis de la economía y de la seguridad”, añadió Herrera.
La construcción de la planta en Hidalgo también fue defendida por diputados federales del PRI y del PRD, al coincidir en que ese estado cumple con los requisitos establecidos por Pemex.
“Sería un error que al final el proyecto sea trasladado a Guanajuato”, comentó el diputado federal por Hidalgo, Gerardo Sosa Castelán (PRI), al indicar que el Congreso local ya aprobó el crédito para adquirir los terrenos y el gobierno ya negoció su compra, por lo que no hay argumento para cambiar de sede.
Javier González Garza, del PRD, dijo que “el gobierno federal sigue empujando para llevarse la refinería a Guanajuato”.
El alcalde de Salamanca, el panista Ignacio Luna, consideró que hasta el momento “no hay nada para nadie”, pero aseguró que “aquí todo está preparado por si se decide que sea Guanajuato”.
El gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva (PAN), viajó a la ciudad de México en espera del pronunciamiento de Pemex. (Con información de Xóchitl Álvarez) México, D.F./Francisco Reséndiz (El Universal)

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